Si un opositor ya siente debilidad por el material escolar, el inicio de septiembre trae consigo el punto álgido de los antojazos en compras para opositar. En mi caso no es difícil empujarme al gasto, si bien llevo años tratando de reprimir mis ansias de acaparar todo lo que creo necesitar cuando me inicio en una nueva actividad: que si los bonsáis, que si running, que si el aquagym, que si el maquillaje… Tengo que dar ejemplo a los niños y desde que soy madre compro mucho menos que antes de serlo. Sin embargo, ya os conté que mi desembarco en la preparación de las oposiciones para convertirme en profesora de secundaria trajo consigo el estreno en dos técnicas de estudio que jamás había utilizado: el subrayado y los audios de los temas que debo memorizar. En redes, he quedado fascinada por la enorme variedad de subrayadores y formatos varios para poner en práctica esta técnica y, como de verdad me ayuda mucho con la memoria visual y el desembolso económico es muy discreto, añadí algunos modelos a mi lista de deseos de Amazon. Sin embargo, navegando por el portal chino topé con estos subrayadores de Aliexpress: un formato precioso, un precio de risa y con la ventaja de incluir punta gruesa y fina en el mismo rotulador. No me pude resistir y me lo traje a casa. Tras 3 semanas de espera, me lancé como loca deseando estrenarlo pero mi gozo desapareció a los 10 folios, literalmente.
Subrayadores de Aliexpress. Una vida efímera
El pack que compré fue este que resulta que también se vende a través de Amazon, pero a mí me salió por 4 euros. Tenía 12 colores en tonos pastel (los prefiero a los fluorescentes de toda la vida) que por un lado contaba con una punta rectangular, como la de los subrayadores tradicionales, y por el otro una punta redondeada y gruesa, que permitía subrayar con trazos más finos y precisos. Estéticamente eran muy bonitos, más manejables que los subrayadores rectangulares que había conocido hasta entonces, más pequeños para transportar muchos colores en vacaciones ¡todo parecía ideal! El problema surgió cuando elegí el color naranja para subrayar la convocatoria de oposiciones de este año, a fin de que me sirva de guía para la que yo espero que se anuncie de cara a 2022, y en menos de 20 páginas me había quedado sin tinta. Ni por la punta gruesa, ni por la punta fina salió ni un poquito de color más. Pese a su escaso precio, los había cuidado como oro en paño, manteniéndolos fuera del alcance de los niños para que no los dejasen destapados y se secasen, ni los usasen para colorear a lo bestia, ni maltratasen las puntas, etc. Pues ni por esas he conseguido que se prolongue su vida. Si te digo la verdad, es la primera vez que se me acaba un subrayador, así es que los que me quedan los usaré para legislación, esquemas y diversos trabajos sueltos, pero no para el subrayado de temas porque no duran nada y tendría que estar encargando nuevas unidades cada pocos días si quiero mantenerme fiel a mi código de colores.
Rotulador Stabilo Swing Cool Pastel
Despechada por el fracaso de los subrayadores de Aliexpress, me fui a Amazon a desahogarme mirando mi lista de deseos y decidió traerme a casa los subrayadores Stabilo Swing Cool Pastel. 6 colores ya me iban a costar el doble que 12 de los chinos, pero lo que me había quedado claro es que el formato del rotulador chino con cuerpo redondeado, como de bolígrafo, me resultaba mucho más cómodo que el rectángulo tan basto de los modelos tradicionales. Aunque no subrayo tanto texto como para que el diseño me resulte insoportable, por lo que esta versión aplanada intermedia de Stabilo me ha conquistado. Por supuesto, lo primero fue darles uso subrayando al menos 20 páginas más de otra legislación ¡y prueba superada! No ha hecho amago de secarse, ni de falta de tinta. Lo que no puedo asegurar aún es cuánta vida real tendrán.
Subrayador Q-Connect
Cuando ya creía estar surtida de colores para una buena temporada, se cruzó en mi camino una súper oferta y claro ¡tuve que comprarla! Así volví a recaer con una marca china, la de los subrayadores Q-Connect pero es que por 3,30 euros volvería a tener 6 colores nuevos… Sí, está visto que los precios tentadores nos hacen picar sin solución. Como normalmente esta marca se vendía bastante más cara, al doble del precio que yo iba a pagar, quise creer que su calidad lo merecería, y creo que así ha sido. Los colores parecen más vivos y menos pastel al ver el exterior, pero una vez en el papel son más tenues, así es que he ganado al arriesgar. Los tonos me gustan menos que los de Stabilo, pero me han venido bien para diferenciar nuevas partes de cada tema, porque definitivamente ¡necesito más de 6 colores distintos para destacar todos los ítems que necesito!
Ahora sí, creo que me voy a quedar quietecita con las compras de colores al menos hasta mi cumpleaños, que es el mes que viene. Porque este año tengo una lista tremenda de antojitos para opositar. Y no te quiero contar la búsqueda exhaustiva del bolígrafo perfecto que estoy haciendo de cara al día del examen escrito, porque tras mi prueba para saber cuántas palabras puedo escribir por minuto, comprendí que en mi caso, el grosor y el tamaño del bolígrafo sí importan ¡y mucho!
¿Cuál es tu subrayador ideal? ¿Fluorescente, metalizados o en tonos pastel? ¿Arriesgas para conocer nuevas marcas o sólo te fías de las que ya tienen un gran nombre en el mercado?
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